El carau o carao (Aramus guarauna) es un ave que habita desde Norteamérica hasta el norte de Argentina. Tiene plumaje de color pardo, con pintas blancas en el cuello y la cabeza. Es de tamaño medio, con un metro de envergadura de alas, unos 70 cm de largo de cuerpo.Tiene patas largas, y su pico es largo, de color amarillo con la punta oscura, adaptado para alimentarse de caracoles.
Lo que hace destacar a esta especie de aves es su canto. Es muy frecuente escucharlo al atardecer y anochecer cerca de lagunas y arroyos. Suena como un lamento que antiguamente se interpretó como “carau carau” y los indígenas, habituados a nombrar las aves según el ruido que emiten, la bautizaron así. Es un ave muy presente en el folklore regional guaraní, donde se comenta que, antiguamente, un muchacho joven fue a buscar remedios para su madre enferma. Sin embargo se encontró una fiesta a mitad de camino, y se quedó a bailar. Mientras estaba en la fiesta, una persona le comenta que su madre ha muerto, a lo que el muchacho responde “ya habrá tiempo para llorar”. Entonces el dios Tupá le castigó transformándolo en un ave que llora al atardecer.
Su canto, además, fue utilizado para dar sonido al mitológico hipogrifo de las películas de Harry Potter. Aunque he intentado reconocer el canto en las escenas de las películas, y me ha resultado difícil. Quizás esté un poco modificado o un ornitólogo familiarizado con la especie pueda reconocerlo más fácilmente.