El año 2014 fue emocionante en cuanto a los avances para mejorar la vida de los lesionados medulares. Fuimos testigos de cómo unas ratas parapléjicas caminaban gracias a dos electrodos que transmitían impulsos eléctricos a su médula espinal [1], y además vimos el caso de Darek Fidyka, quien quedó paralizado en 2010 y ahora puede mover las piernas gracias a un autotrasplante de células de la glía envolvente del bulbo olfativo. [2]
Esto es relevante por varios motivos, pero el más importante es que las lesiones medulares siempre han sido sinónimas en nuestra sociedad de una barrera infranqueable con una carga psicológica indescriptible para el que las padece. Hasta ahora se habría considerado un milagro hacer andar a un parapléjico pero esto demuestra que la ciencia tiene el potencial de competir con la mitología. Este hecho es importante porque en una época en la que parece que no hay dinero para nada, como sociedad tendremos que aprender a elegir qué cosas son realmente importantes.
Estas noticias no solamente dan esperanza a todos los lesionados medulares sino que por el tipo de dolencia que tratan nos ayudan a valorar a la ciencia como lo que realmente es: una herramienta que no solo nos ayuda a entender el mundo sino que además tiene el poder de transformar nuestra sociedad.
[1] Noticia 1
[2] Noticia 2
Fernando Cervera Rodríguez es licenciado en Ciencias Biológicas por la Universidad de Valencia, donde también realizó un máster en Aproximaciones Moleculares en Ciencias de la Salud. Su labor investigadora ha estado centrada en aspectos ligados a la biología molecular y la salud humana. Ha escrito contenidos para varias plataformas y es redactor de la Revista Plaza y de Muy Interesante. Ha sido finalista del premio nacional Boehringer al periodismo sanitario y ganador del Premio Literario a la Divulgación Científica de la Ciutat de Benicarló en el año 2022. También ha publicado un libro con la Editorial Laetoli, que trata sobre escepticismo, estafas biomédicas y pseudociencias en general. El libro se titula “El arte de vender mierda”, y otro con la editorial Círculo Rojo y titulado “A favor de la experimentación animal”. Además, es miembro fundador de la Asociación para Proteger al Enfermo de Terapias Pseudocientíficas.