Antiguo y primitivo, ¿realmente sinónimos?

Hace casi diez años que mi profesor de Evolució Química i Bioquímica nos retó con un ejercicio altamente interesante: buscar en diversos diccionarios europeos el significado de antiguo y primitivo, y valorar si esas definiciones eran sinónimas en biología evolutiva. Las clases con Juli Peretó siempre fueron de lo mejor de la carrera y saber contestar de manera propia y original era el elemento más importante en sus asignaturas. Prueba de ello es que, muchos años después, todo lo que aprendimos respondiendo a sus preguntas aún nos sirve para pensar mejor.

Volviendo al tema planteado, en el lenguaje coloquial antiguo y primitivo son sinónimos que se utilizan intercambiando sus significados, ¿pero es real esa sinonimia? Si dedicamos unos minutos a buscar las palabras en algunos diccionarios, por ejemplo el inglés (ancient y primitive), el francés (ancien y primitif), el portugués (antigo y primitivo) o el alemán (antik, primitiv), llegamos rápidamente a dos conclusiones: la primera es que todos los europeos somos hermanos y quien no aprende idiomas es porque no quiere, y la segunda es que esas dos palabras no son sinónimas aunque en el lenguaje coloquial sí se utilicen de tal modo.

Aunque hayamos mezclado lenguas germánicas y latinas, en todos los idiomas analizados las dos palabras por separado tienen una descripción idéntica. En concreto el significado viene dado por la raíz latina que también fue adoptada por el alemán y el inglés: la palabra antiguo viene de la expresión antiqŭus, que significa que existe desde hace mucho tiempo, y la palabra primitivo viene de la expresión latina primitīvus, que significa rudimentario o menos avanzado. Es decir, algo primitivo no tiene por que ser antiguo, y algo antiguo no tiene por qué ser primitivo. Por ejemplo, hoy en día existe la moderna costumbre adoptada por ciertos turistas en Mallorca de lanzarse ebrios hasta la piscina de un hotel desde el balcón de un décimo piso, lo cual podría catalogarse de primitivo. Por otro lado, en las islas Pitcairn se aprobó en 1838 el sufragio femenino, hecho antiguo pero que nadie con ciertas habilidades mentales estaría dispuesto a catalogar de primitivo. En resumen, que algo sea antiguo no quiere decir que sea mejor o peor, sencillamente es más viejo, y que algo sea primitivo no tiene por qué ser debido a que tenga mucho tiempo.

En biología evolutiva describir algo como primitivo, según el libro Principios de zoología (Hickman), es decir que algo es primordial, poco evolucionado y muy próximo en estructura a sus tipos ancestrales más tempranos. En cambio, decir que algo es antiguo solo implica que es lejano en el tiempo y sin hacer alusión a su nivel de organización.

Un ejemplo que muestra esa diferencia es la evolución de los trilobites, que eran una clase de artrópodos extintos dentro del subfílum Trilobitomorpha. Dentro de esos organismos la característica de tener pocos metámeros en el tórax era considerada primitiva y, por lo general, conforme se avanza en el registro fósil los trilobites tienen más metámeros, pero ocurre que algunas familias dentro del subfílum simplificaron su estructura con el paso del tiempo y redujeron el número de metámeros, así que a pesar de que la presencia de pocos metámeros sea una característica primitiva no por ello implica ser antigua.

Filo_si

Figura 1. En este cladograma podemos ver que la reducción de la importancia de la cabeza y la descentralización del sistema nervioso, ambos caracteres primitivos para los moluscos, son recientes en la historia evolutiva de los bivalvos y los escafópodos.

Otro ejemplo lo encontramos en la evolución de los moluscos: no tener cabeza es un carácter considerado como primitivo dentro de muchos grupos biológicos (de hecho, la expresión no tienes cabeza ha sido utilizada a lo largo y ancho de nuestro mundo por abuelas de todo tipo para llamar primitivos a sus nietos). Si observamos la evolución de los moluscos veremos que, conforme va avanzando la historia biológica, las especies van desarrollando una cefalización más patente, siendo la cabeza poco desarrollada un carácter primitivo presente en las especies primordiales. La cefalización va apareciendo hasta hacerse muy patente en gasterópodos y más aún en cefalópodos, que como bien podría resumirse a partir de su nombre, son una cabeza con patas. Ahora es cuando llegamos a la parte interesante: como adaptaciones posteriores otras clases de moluscos, en concreto Scaphopoda  y Bivalvia —los colmillos de mar y los mejillones son dos ejemplos—, van perdiendo la cabeza (en el sentido biológico del término) hasta que desaparece completamente en los bivalvos, siendo la ausencia de cefalización un carácter primitivo pero evolutivamente moderno.

Así que como reflexión final me gustaría dejar claro que aunque algo sea antiguo no quiere decir que sea primitivo, y aunque sea moderno tampoco quiere decir que sea avanzado. Y esto es una realidad aplicable no solo a la sociedad donde vivimos, sino también a la biología evolutiva: los organismos y las sociedades no evolucionan con el objetivo de tener una mayor complejidad y si los caracteres que mejoran la supervivencia son los más primitivos serán los seleccionados. Por ello no nos llevemos a engaños: una sociedad moderna no es sinónimo de sociedad avanzada, y eso, por suerte o por desgracia, lo decidiremos nosotros mismos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *